Hemos cambiando tanto, somos extraños sin escencia, caminando sin zapatos por los días, apurados en ser felices. Consiguiendo sonrisas vanas, conversando sobre lo insoportable del pasado y navegando fuera de toda incertidumbre.
Te vas a cada momento y yo me pierdo al encontrarte. Descubro quién fui y ya no soy cuando veo tu rastro o reconozco mis palabras.
No he fallado pues en los intentos construí lo que quise ser, un presente inacabable o un absurdo sueño de medianoche.