Ojalá valga la pena, ojalá lo que sacrificas sea compensado
por lo que crees que vivirás, que todo aquello que te hizo reír sea borrado por
nuevas palabras, nuevas sonrisas, nuevos besos. Ojalá que los momentos que
piensas vivir reemplacen con creces los que nosotros vivimos, dudo eso pero
ojalá sea así por tu bien y para que el arrepentimiento no te llegue tarde y te
deje en zozobra.
Ojalá que valga la pena, lo que sientes, lo que haces por lo
que sentiste en un momento y lo que hicimos juntos, sé que faltaron muchas
cosas entre tú y yo, el tiempo y la distancia permitieron crear una brecha
enorme, insalvable que hizo ver que no estas preparada para amar pues fácilmente
encontraste otro camino que te ha deslumbrado.
Ojalá que valga la pena lo bonito que sientes y sea
duradero, de mayor poder que lo nuestro, con nuevos días de felicidad, ojalá
que tus conversaciones sean más interminables que las nuestras, que tus
sonrisas sean más sinceras que las que juntos soltábamos, que tu cabecita se
recueste en su hombro como en el mío lo hacía.
Ojalá que su mano tome tu mano con más intensidad con la que
yo te tomaba, ojalá que acaricie tu cabello con la mitad del amor que yo
entregaba cada vez que lo hacía. Y que tras llegar a tu casa y en el silencio
de tu cuarto pienses y digas, valió la pena, alejarse y decir adiós, pero
cuidado que aparezca un recuerdo mío y sueltes una sonrisa, se hará costumbre y
no habrá marcha atrás.
Ojalá a él no se le acaben las palabras, ni a ti las
sonrisas, ojalá navegues por el mar del ensueño como me pasaba a mi cuando te
veía, es más, ojalá él te vea con la mitad de amor en los ojos con los que te
veía yo y con el doble de amor que había en tus ojos cuando me mirabas. Ojalá
sus recuerdos estén acompañados de la locura con la que tú y yo solíamos actuar
y al final no mires el mar y te sientas sola como hago yo ahora.
Ojalá disfrutes de todos los momentos desde que dejaste de
disfrutarlos conmigo y no llegue a ti la soledad como me ha llegado a mí, que
me ahoga y me sobrecoge, ojalá siempre esté él a tu lado en vez de mis
recuerdos y que finalmente digas, no me equivoqué, no me dejé llevar por la
emoción, y que mi amor permanezca siempre intacto para ti.
Ojalá Princesa, ojalá, ojalá entiendas al fin por qué hiciste todo
esto y ojalá esté yo nuevamente para abrazarte con todo el amor de estos textos:
https://rabillodeojo.blogspot.com/2017/03/dedo-menique.html
https://rabillodeojo.blogspot.com/2018/11/la-inquebrantable-promesa-del-dedo.html