Como una triste canción que llega en el tumulto y la algarabía de una fiesta mientras sonríes al finalizar la pieza de baile.
Como la sonrisa sincera después de una pelea que parecía no acabar pero que terminó con un abrazo y las disculpas del caso..
Como la compañía en una calle oscura, solitaria y peligrosa, en una noche fría de invierno oscurecida por el silencio del viento.
Como la paz en el corazón golpeado por una decepción trágica que creyó eterna y no pudo estar mas equivocado.
Como Sancho advirtiendo al Quijote sobre los gigantes de cuatro brazos que no eran mas que molinos de viento.
Cómo la certeza en una mente llena de dudas que nunca quiso creer.
Cómo el amor esquivo que viaja de corazón en corazón y que cayó en el tuyo y luego en el mio.
Así llegaste tú para mi. Intensamente confundido aclaraste los sentidos y devolviste el vínculo de mi sarcasmo y mi ironía.
