jueves, 22 de febrero de 2024

Carta de disculpas

Lo siento, era un mal momento para que ingreses, perdón por tratarte tan cortante, por ser tan seco, pero no estoy en un buen momento, he tenido mejores días, no puedo sacarme de la cabeza que me he equivocado, he cometido un terrible error y me he decepcionado de mi mismo por haber sido tan tonto al pensar que las cosas serían diferentes. Además de ello, tengo mucho trabajo, conseguir profesores a última hora, hacer el horario y organizar el colegio a diez días de iniciar las clases me tiene loco. Tan loco que solo me di cuenta de que te traté mal cuando apagué mi computadora e iba a salir del trabajo. Sé que nunca te enterarás de esto, no me importa, pero me gustaste desde el primer momento que te entrevisté y no te presté atención por lo mismo que arriba explico. Solo sé que hoy no debí ser tan cortante pues noté que esperabas que sea el mismo de la entrevista, ese que si te prestaba atención y que decía cualquier tontería. Lo siento, discúlpeme profesora, pero tranquila, habrá otra oportunidad, encontraré el espacio de conversar y te des cuenta que soy chévere como el de la entrevista, no el amargado que prácticamente te botó de su oficina. No me excuso, para nada, pero hasta hace unos días tenía otras prioridades, ahora no, mi prioridad soy yo, ya me cansé de cargarme con problemas en mi cabezota, pensando que todo puede ir bien, pero son cosas que no dependen de mi y ¿por qué debo preocuparme de cosas que no dependen de mi? para nada, hoy y en adelante todo depende de mi, primero seré feliz yo y después lo que venga. Hubiese sido hipócrita que te sonría también cuando tenía mil cosas en la cabeza, por ello disculpa tambien, no sé fingir cuando estoy molesto, pero ya pasó, así que puedes ingresar cuando quieras a mi oficina porque estaré pendiente. Saludos.