Con el corazón limpio, sin sentimientos profundos, al borde del vacío interno. sin mas complicaciones que caminar en una mañana fría con camisa corta, estoy buscando la razón de la vida misma. Inutilizando mis sentidos me concentro en abstraer mis pensamientos y llevarlos lo mas lejos posible de cualquier situación comprometedora que sea capaz de remover alguna fibrilla sentimental de apego o necesidad de otra persona.
Calmo los impulsos que me llevan a lugares remotos donde me atrapa el amor perdido que me deja desolado, sin ganas de escribir por temor a la indiferencia. Rechazo toda palabra que me arrastre a los recuerdos que con el paso del tiempo se vuelven realmente absurdos.
Cuidadosamente pienso en la soledad porque esta puede ser un arma de doble filo. Rechazo continuamente ofertas de compañía y desde el absoluto silencio interno regreso por los pasos perdidos buscando los retazos de amor y algún otro extraño sentimiento dejado en la vida.