jueves, 18 de abril de 2013

Amiga...

Conocí a Jessika en la parroquia  por el año 2000, cuando se iba a acabar el mundo y como suele pasar con las personas que me ven y no me conocen, le caí mal y por cierto el sentimiento fue mutuo, sin embargo y contrariamente a nuestras primeras impresiones, cuando verdaderamente nos conocimos, nos hicimos amigos, sin ningún adjetivo que acompañe a esa palabra, solo amigos, conversábamos  congeniábamos  ella me enseñaba sobre dios y yo le extendía todas mis dudas.

En realidad no se cuando me enamoré de ella, pero los primeros años de conocernos fuimos amigos sinceros, preocupándonos el uno del otro y sabiendo que cuando uno de los dos cayera, el otro estaría allí para levantarlo. Hoy he recordado esos momentos cuando fuimos amigos, en la mesa de nuestra casa y con nuestra hija sentada frente a nosotros, recordé viendo el rostro de Jess los tiempos de la parroquia en los que dedicábamos nuestro tiempo a intentar cambiar el mundo, cuando caminábamos hacia un cerro para buscar niños que necesitaran bautizarse o cuando leíamos el catecismo para disipar mis dudas o cuando estudiábamos en la escuela de catequistas del Maristas.

Hoy somos amigos pero no los de antes, no los adolescentes, hoy somos adultos, amigos con responsabilidades mas complejas pero hay veces en que veo tu rostro, Jess, y veo a la chica que era mi amiga cuando yo creía que podía cambiar el mundo, veo a la chica de las canciones de Ascoy, veo a la muchacha con la que yo andaba por las calles de Nueva Esperanza tratando de convencer a la gente de que son amados por dios.

Gracias por haber estado conmigo ahí  no pudo ser mejor, gracias por ser mi amiga cuando dios estaba conmigo porque nunca dejaré de creer en dios gracias a ti, a pesar de ser un escéptico e irrespetuoso iconoclasta, tú eres el nexo que no deja, ni dejará que me vuelva un estúpido ateo. Y tal vez dios, que está en ti y en Lucía, si existe en mi gracias a ti.

Hermana amiga, hoy, dieciocho de abril del dos mil trece te dedico la canción que cantábamos juntos y  recurda que el camino que se ha hecho al caminar nos llevará a donde nosotros queremos estar. Te quiero mucho.