Principalmente tus ojos pulcros, marrones claros, sinceros, ataviados de unas líneas en tu iris que no logro descifrar, rodeados de grandes pestañas imposibles de contar (lo intenté 4 veces ¿recuerdas?) y custodiado por tus cejas casi en forma de uve. Eso me gusta principalmente, tus ojos que sin hablar lo dicen todo cuando me miras, que cuando me miras brillan por alguna extraña razón, la misma razón que hace que pueda escribir sin parar.
También tus labios rosados, a veces pintados de un rosa mas fuerte, a veces delineados, a veces sin delinear. Me gusta su movimiento a veces calmado y a veces eufórico, me gusta cuando forman tu sonrisa y puedo ver tus dientes impecables, no amarillos por tantos años de cigarros, como los míos, cada vez que lo haces emites un sonido que también me encanta.
Me encanta tu cabello, siempre limpio, con un olor increíblemente familiar, me gusta cuando está ordenadito pero mas me gusta cuando yo lo desordeno, me gusta acariciarlo, pero sobre todo olerlo, su olor me transporta, me transmite cierta calma y es inevitable no cerrar los ojos al hacerlo.
Tus mejillas, suaves y con hoyuelos, tu nariz y tu frente amplia y tersa, tus orejitas siempre con pendientes, tu sien acaramelada y plana. Tu cuello blanco impoluto en donde siempre cuelgas una cadena de oro con un dije de un símbolo que no distingo (ya prometí regalarte una mas bonita). Tus hombros redondeados y flanqueados por pequeños brazos terminando en tus manos de ángel.
¿Sigo? Podría escribir cuatrocientas cuarenta y nueve mil ochocientos veinticinco cosas que me gustan, desde tu cuello a tus tobillos y aun así me quedaría corto, sabes que me gustas, y repito nuevamente, algo debo haber hecho bien para que la vida me sorprenda cada vez más, creo que hice un pacto con el diablo, lujurioso y vehemente, que me permite disfrutar cada vez mas la vida.
Termino diciendo que nada de lo que observo y me gusta de ti, tendría sentido, sin tu personalidad, esa extraña forma de ser que estoy conociendo, que se ha trasformado desde que te vi por primera vez sentada en una carpeta con los ojos tristes y vacíos, mientras explicaba tontería y media como subdirector, a la chica extremadamente graciosa que a veces hasta me da celos de las ocurrencias que tienes y que a mi no se me ocurren. Entonces, no es solo la envoltura, es lo que contiene, no es solo la cáscara sino la pulpa, no es solo lo que veo sino lo que siento.
Espero haber respondido a tu pregunta entonces ¿Qué te gusta de mi? y discúlpame, sabes que soy mas disoluto, pero en vivo y en directo.