"Bestias corren mil por mi cabeza". La marihuana siempre tuvo ese efecto en mi. Sentía mil bestias en mi cabeza, corrían y me perseguían, Mi único refugio fue la música, tal vez porque justo en ese momento buscaba como loco algún sonido estridente que desaparesca a las bestias. Mar de Copas siempre fue mi refugio, no era estridente, pero me tranquilizaba, exprimia mis sentimientos confundidos entre la soledad y la lujuria. Esta es una banda de culto, nada masivo, recuerdo tres conciertos, íntimos pero desenfrenados, buscando al gordo Nestor donde no estaba o llamando a Lucho Pucho sin tener su número de celular. Pero en medio de las noches desenfrenadas siempre apareció Wicho con su voz ronca y sus infinitas bolsitas transparentes con la canabis. Fue una época turbulenta, felizmente no se me pegó la manía de fumar. Lo mas grato de aquella época fue Mar de Copas y sus canciones que son para mi como una vorágine de imágenes inconexas pero que hace saltar mi pecho porque en algunas de las imágenes puedes aparecer tu.
Si quieren la discografía para escuchar este es el línk
Música de Mar de Copas