Hoy, recién entiendo uno de los enigmas de ser padre. Al fin hoy, he descubierto lo desdichado de esta faena paternal que solo se acaba con la muerte. Lucía se irá algún día, dejándome con el corazón roto. Solo hoy entendí las verdaderas implicancias de su ausencia. Y aunque no se lo diga, estaré destrozado, cuando parta, mostraré una sonrisa fingiendo que su felicidad será mi felicidad pero en realidad no quiero que sea así, quiero que se quede conmigo para siempre.