martes, 24 de mayo de 2011

¿Quién soy?

Soy el que compra medio kilo de huevos todas las mañanas y solo utiliza la clara para batirla con la fuerza de mis manos en un depósito metalico blanco. Soy el que luego compra colorante con sabor a fresas y combina esta sustancia con los huevos batidos.

Soy el que tiene el lunar de bruja en la nariz pero al que los niños no le temen, por el contrario se acercan y  vienen con alegría pidiéndome que les venda la mezcla dulce y mágica.

Mis brazos no se cansan de batir y batir, un  gran resorte me ayuda a mantener esta mezcla dulce y cremosa. El frío no me detiene, el calor tampoco, siempre estoy parado frente al colegio o en el centro del mercado, todos me conocen y me saludan con respeto.

De lunes a domingo sigo la misma rutina y me gusta, hace cuarenta años decidí dedicarme a esto porque era lo único que sabía hacer bien. Mi padre me enseñó la técnica de combinar los huevos con el colorante, saborizante y un poquito de aceite.

Si me ves te darás cuenta que soy feliz, lo poco que gano me alcanza para preocuperme lo necesario. Pero soy feliz, en mi necesidad y mi trabajo sé que lo que me da este trabajo es la satisfacción de empalagar a los niños con un dulce que no se vende en cualquier lugar porque soy el único que lo hace y eso me hace importante.